Abrí mi ojo legañoso hace unos minutos, como todos los sábados, pero a los pocos segundos me di cuenta que no era un sábado cualquiera. Un día como hoy, hace 14 años, se fue mi abuelito. El de caminar lento, pelo blanquísimo y ojos bicolores. Lo recuerdo con su camisa blanca, su pantalón negro y los infaltables tirantes. Lo recuerdo contando las mismas historias una y otra vez (herencia que tenemos todos en mi familia), y lo recuerdo sentado en el comedor comiendo mazamorra de manzana y diciendo "que sssico". Recuerdo su voz por teléfono, pues cuando no sabía algo para las tareas del colegio él era mi propia enciclopedia parlante. Recuerdo sus millones de libros, llenos de recortes de periódicos, y recuerdo sus "cuestiones personales con las cucurbitáceas". Recuerdo el pan tolete con huevo frito, y recuerdo los juguetes fantásticos que me hacía como el teléfono con latas de café kirma y el kaleidoscopio con pedacitos de vidrio y espejos. Recuerdo el pino plantado a la mitad del jardín con el que yo jugaba montando mi triciclo, y recuerdo su cuarto, el cual aún olía a la abuelita pues él se rehusaba a botar la ropa, el maquillaje y los perfumes de la mujer que lo había dejado diez años atrás. Recuerdo cómo alimentaba a los pajaritos en el jardín, y recuerdo cómo me llevaba a conocer "la casa del gato" en nochebuena para luego regresar a la casa y descubrir que Papa Noel ya había llegado dejándome a Patty Patinadora y a un pequeño Pony. Recuerdo sus trescientos relojes y el constante tic tac tic tac, recuerdo sus caramelos, sus cigarros, su fabuloso garaje lleno de tesoros y el olor a Kolynos en el baño. Recordaría más cosas, pero mi abuelito se fue tras la abuelita cuando yo tenía 12 y ya no tuve mucho más que recordar.
Un día como hoy me dejó el abuelito. Y un día como mañana, hace 14 años, los pajaritos que él alimentaba se despidieron de él en su cuarto, revoloteando alrededor de su cama mientras el tímido sol de junio se colaba por la ventana.
Tu ratonesca te extraña abu.
1 comentario:
acabo de termianr de postear, y escribí sobre mi abuelita. Distinto. pero me pareció curioso.
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