Son las pequeñas cosas las que me hacen feliz. Un mensajito de medianoche mandando un beso, un lapicero con dibujos de vaca o una vaca desparramada sobre mi monitor (Vacas del mundo: las amo, pero también me las como). Mi Homero Simpson tentándome con un donut todos los días desde mi escritorio en el trabajo, y Mike Wazowsky y la foto de mi abuelito alentándome todos los días a mi izquierda. Mis libros en la mesa de noche, a medio leer, y la banca al pie de mi cama donde me gusta sentarme un ratito todas las mañanas (mientras me pongo medias y zapatos). Me gusta el poster de Ballack en mi oficina y mi pequeña mini bodega que adoro con locura; la llamada de tardecita de mi mami preguntándome qué tal tu dia mi princesa, ya te sientes mejor. Adoro mis millones de fotos, y me gusta de cuando en cuando limpiar mis carteras y encontrar siempre algo fantástico (una moneda de 5 soles!! ehhh!!!!!). El olor a pye de manzana cuando llego a casa, el olor a pan recién horneadito o el olor a Escencia de Duende que últimamente me trae bonitos recuerdos. Me gusta el viaje en el taxi mientras me enchufo al MP3 y escucho las mismas canciones que están ahí hace 5 meses porque me da flojera bajarme otras, y miro la calle, y me concentro en la letra (soy una lyrics person). Me gusta mi taza de Warner. Me gusta mi piyama sexy con el hombro al aire, y me gusta la sensación cuando alguien te da la mano y entrelazas los dedos por primera vez. Me gusta cuando Just like Heaven suena en mi teléfono porque sé quienes llaman, y me gusta meter mi dedo en la leche condensada y chuparlo hasta que ya no sepa a nada. Me gusta ver infomerciales cuando recién despierto, me gusta cuando abro la refri y hay algo rico de comer y oh siii, me gusta una coca cola heladiiiiiita en un vaso sin hielo o una pilsen en la madrugada, muerta de sed. Me gustan los chiches y las cochinaditas que da pena botar, y me gusta verlas de vez en cuando y reirme y recordar. Me gusta contar las mismas historias exageradas cien veces y recordar las mismas aventuras del pasado otras cien veces más. Me gusta cuando de repente escucho una canción maravillosa en la radio y siento que es una coincidencia cósmica, y me gusta el olor a mar a las 5 de la tarde en verano cuando ya no hace mucho calor. Me gustan los mails de "y, en qué andas" así de la nada, y me encanta esa sensación de frío cuando recién te metes en la cama y poco a poco se va poniendo calientito. Me gusta no olvidarme de nada cuando me meto a la cama (como apagar la luz o tener el control remoto a la mano) y sentirme en mi own private idaho todo para mí. Me gustan las gomitas en forma de gusanos y las papitas del mc donalds. Me gustan las cosas que no tienen sentido, y me gusta relacionar cosas irrelacionables y encontrarles la similitud. Me gustan los imprevistos y las visitas fugaces, las visitas no tan fugaces, las visitas eternas y las conversaciones sobre temas equis que no tienen cuando parar.
Me gustan las pequeñas cosas que los días te dan de a puchitos para que las disfrutes. Pero sobre todo, me gusta encontrarlas y darme cuenta de que son segundos fugaces de felicidad que sumados, hacen mis días bastante felices.
3 comentarios:
A los quince años, mi mayor trauma era que nunca había tenido enamorada y mi mayor envidia no era la falta de besos o de sexo principiante, sino la de tener una mano con la cual entrelazar dedos. Me encantaban las parejas que caminaban de la mano, como si les costara un mundo separarse. Un día le conté eso a mi mejor amiga. Ella me miró con ternura y no dijo nada. Semanas después, caminando por La Molina, cogió mi mano de la nada y sus dedos se mezclaron con los míos. Fue una de las sorpresas más bonitas que me han dado.
Raindrops on roses and whiskers on kittens
Bright copper kettles and warm woollen mittens
Brown paper packages tied up with string,
These are a few of my favorite things.
Cream coloured ponies and crisp apple strudel,
Door bells and sleigh bells and schnitzel with noodles
Wild geese that fly with the moon on their wings
... uy, me provoco un strudel de manzana.
Hmm ese mismo dia estaba pensando lo mismo y se lo comentaba a una personita... me gusta lo cojudamente feliz que me pueden poner algunas cosas tan simples o tan chiquitas que a veces pasan desapercibidas pero que yo disfruto a mil.
PD: Me encanta como a veces a la distancia pensamos en lo mismo, love you brujita
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